Según el Sindicato Argentino de Docentes Privados (SADOP), durante la noche de este domingo, los representantes legales del emblemático Instituto French, ubicado en Ramos Mejía, informaron a los trabajadores que “se nombró al síndico y se apersonó a la escuela para comenzar los procedimientos del pedido de quiebra” realizada por los dueños del colegio.
“Es otro gesto de perversidad por parte de los empleadores”, aseguró la secretaria gremial del Sindicato, Romina Cortaberria, en diálogo con El1 Digital, y agregó: “Ellos mismos han asfixiado y vaciado la SRL: a todas luces, eso es una estafa. También, se han aprovechado de los recursos de la provincia de Buenos Aires y, por ende, de todos los contribuyentes”.
Cortaberria detalló que aun hay cuestiones sin resolver: alumnos que todavía no solicitaron el pase, estudiantes que deben rendir durante febrero y empleados que los convocan para trabajar, pero les adeudan parte de los salarios. Además, los dueños del instituto no se presentaron a la última conciliación en el Ministerio de Trabajo y, por esta razón, se realizará una nueva audiencia el 10 de febrero.
«Creemos que se trata de una quiebra fraudulenta»
“Estamos acompañando y delineando otras estrategias judiciales porque creemos que esto se trata de una quiebra fraudulenta, sabemos que va a ser un camino más arduo, más sinuoso a nivel judicial, pero creemos que es lo correcto. Los trabajadores han sufrido mucho maltrato, esperamos que la resolución de este conflicto sea a favor de ellos”, finalizó.
Por otra parte, no todos los educadores están de acuerdo con las acciones tomadas por el sindicato durante las negociaciones. “Parte de los docentes no nos sentimos representados por SADOP y nos sentimos abandonados por todos. Se fueron prometiendo cosas en las audiencias que no se cumplieron. Nos sentimos estafados emocionalmente porque mientras estábamos esperando los resultados de las conciliaciones, se estaba sorteando el síndico”, manifestó Jimena Krywdik, docente y mamá de exalumnos de la institución.
Krywdik informó que, actualmente, no se les abonan los sueldos y que están ligados al colegio hasta fin de mes, lo que les genera inconvenientes para buscar nuevos empleos. Sin embargo, a pesar de las diferencias con el sindicato, coinciden en que las acciones de los representantes legales de la institución son para realizar un negocio inmobiliario.
“Ver la faja de clausura me rompe el corazón, pero acá se priorizaron otras cuestiones económicas e inmobiliarias. El daño que hicieron es irreparable y hay daños emocionales que no se sanan, porque el síndico va a regular cuánto se le paga a cada uno de nosotros, pero todo lo que venimos sufriendo desde octubre, lo que lloraron los chicos, lo que lloramos nosotras, eso no se regula con lo que dicte el síndico”, concluyó.
Fuente: El1Digital