La compañía farmaceútica Janssen, de la multinacional Johnson & Johnson, desarrolló su vacuna experimental contra el COVID-19, y en ese contexto, eligió a la Argentina como uno de los países para llevar a cabo la fase 3 de su investigación.
En ese marco, como parte del estudio “Ensemble”, convocan hasta 6.000 voluntarios en el país –sobre un máximo de 60.000 en todo el mundo- para llevarlo a cabo. Las pruebas se efectuarán en DIM Centros de Salud, ubicados en Ramos Mejía, y cuya sede principal se encuentra en avenida Rivadavia 14.252.
Así lo difundió esta clínica, en un comunicado reproducido por la agencia oficial estatal Télam, entre otros medios. “Es el último paso antes de la aprobación final para su distribución masiva”, aseguraron.
Según Oscar Montaña, director del estudio en Argentina, la diferencia de esta vacuna con las demás en experimentación “es que se trata de una sola dosis”, mientras que las otras en danza requieren dos.
Además, marcó que «los estudios de fase 1 y 2 demostraron que esta única dosis fue suficiente para producir anticuerpos neutralizantes contra la proteína ‘espiga’ en más del 95 por ciento de los voluntarios que recibieron este agente vacunal».
Montaña indicó que esta vacuna «ha sido diseñada para poder realizar campañas de vacunación masiva dado que no requiere de mantenimiento de refrigeración estricta».
Asimismo Alejandra Camino, subdirectora del estudio, aseguró que la investigación está diseñada «para tener la base de voluntarios más grande a nivel internacional» y destacó que «se trata de un estudio multicéntrico, lo que significa que personas que residan en la zona Oeste podrán participar sin tener que trasladarse a Capital Federal, donde generalmente se nuclea este tipo de acontecimientos».
Por su parte, la investigadora Silvina Ivalo señaló que los participantes «recibirán en forma aleatoria placebo, o el agente vacunal en estudio», el cual funciona como un «transportador de mensaje» para producir los anticuerpos contra la proteína S (espiga) y, de este modo, inducir inmunidad.
En esta línea Ivalo explicó que «(El agente vacunal) está desarrollado en base a una plataforma llamada de vector viral no replicativo, inactivado, se utiliza solamente la envoltura del adenovirus para transportar la porción de ADN que contiene la información».
La investigadora recordó que el placebo «es una solución fisiológica», y aseguró que ni el agente vacunal ni el placebo «pueden producir infección por COVID-19, ya que el coronavirus no es parte de la vacuna».
Requisitos
Entre los requisitos para formar parte del estudio, se encuentran tener más de 18 años de edad, un estado de salud “bueno o estable (puede tener afecciones médicas subyacentes, si sus signos y síntomas son estables y están bien controlados)”.
Para saber si son elegibles, los interesados deben completar un cuestionario on line.
Los participantes que reúnan los requisitos estarán en el estudio durante un máximo de dos años y un mes. Tendrán hasta ocho visitas (ya sea en su casa o en el centro del estudio) con el médico del estudio o el personal de investigación clínica.
Control
La investigación incluirá estudios y evaluaciones para el control de la salud de los participantes. Dichos procedimientos incluirán, entre otros:
*Un cuestionario sobre cómo se siente y si tiene algún síntoma de COVID-19. Este cuestionario puede completarse electrónicamente a través de una aplicación (teléfono, iPad) o por medio de un portal web en una computadora personal.
*Exámenes físicos.
* Medición de los signos vitales (presión arterial, frecuencia cardíaca, frecuencia respiratoria, saturación de oxígeno y temperatura corporal).
Más información
Para mayor información, los interesados pueden consultar la página web https://www.covidvacuna.com.ar o
bien enviar un WhatsApp al número 11-2653-0804.
Fuente: El1Digital