Tras los diferentes incendios que sucedieron en complejos habitacionales y edificios, tanto en Ramos Mejía, como en Haedo, surge la importancia de tener en cuenta ciertas recomendaciones ante situaciones de riesgo. Así, los Bomberos Voluntarios de La Matanza brindaron consejos.
En diálogo con El1 Digital, Claudio Grammático, encargado del Destacamento de Tapiales, señaló: “Uno de los problemas que ocurre son los electrodomésticos que quedan enchufados permanentemente, como las heladeras o lavarropas, si hay una baja de tensión, esto puede provocar una recarga térmica y causa un incendio. Por eso, es importante que se hagan las conexiones eléctricas con personal capacitado y matriculado”.
En cuanto a las estufas, también es recomendable que sean instaladas por gasistas matriculados. “Muchas veces se colocan acolchados a pocos centímetros y estos absorben la energía y llega a una temperatura de ignición, como consecuencia, el colchón comienza a humear y despide monóxido de carbono, por lo tanto es mejor que no haya elementos cerca de las estufas para evitar que se generen gases tóxicos. Como así, es necesaria una buena ventilación”, aseguró.
Además, Grammático, sostuvo que es aconsejable que en los hogares hayan extintores ya que son elementos indispensables para extinguir un principio de incendio. “A veces es difícil concientizar a las personas para que tengan estos elementos en sus casas, pero no es para apagar un foco de grandes proporciones”, aseveró.
“Cuando se presentan incendios causados por algún productos inflamables, como alcohol, pintura, gasoil o aceites, se recomienda no arrojar agua ya que hace una reacción química que aviva las llamas y empeora la situación”, indicó y subrayó la importancia de los extintores.
Por otra parte, frente a un caso de incendio dentro de lugares cerrados como edificios, o fábricas, Grammático explicó que el humo tiende a elevarse, por lo tanto, las personas que se encuentran en un inmueble deben descender y no subir a balcones o terrazas, ya que allí se concentra el monóxido de carbono. “Como norma de seguridad, hay que descender y tratar de estar lo más cerca del piso. La gente desconoce que el oxígeno es desplazado hacia abajo y en los primeros 20 o 30 centímetros del suelo no hay gases venenosos, es decir, que hay menos riesgos de intoxicación y contaminación de las vías aéreas”, expresó.
Fuente: El1Digital