Luego de ser testigos de reiterados hechos de tránsito en el cruce de las calles Pringles y Humboldt, en la localidad de Ramos Mejía, vecinos reclaman una vez más la instalación de semáforos, lomas de burro o reductores de velocidad. En diálogo con El1 Digital, Mariela, vecina de la zona, recordó que “hace como diez años” que mantienen este pedido, pero “sin novedades”.
“Suelen ocurrir muchos accidentes y los autos colisionan contra las fachadas de las viviendas. Lo único que se hizo, un año antes de la pandemia, fue instalar un semáforo que, si bien dijeron que iba a estar en la esquina de Humboldt y Pringles, lo terminaron poniendo en otra, aparentemente por error”, explicó la vecina. Asimismo, aseguró que crearon una loma de burro con material de brea sobre la calle Pringles que “más o menos hacía algo”, pero “la sacaron de un día para otro”. “Ahora reclamamos otra vez. Hace 15 días nos dijeron que, supuestamente, iban a poner un reductor”, agregó. Según Mariela, el último hecho de tránsito ocurrió la semana pasada a las cinco de la tarde.
“Están todos apurados. Hay semáforos en Bolivar y Humboldt y en Necochea y Humboldt, entonces los autos hacen ´onda verde´: ninguno frena en la esquina, y después vienen las consecuencias. Los últimos dos ocurrieron con seis días de diferencia. Los colectivos no suelen chocar, pero los autos sí, y suelen accidentarse los conductores de los mismos vehículo, pero no la gente que va caminando, por suerte. Por la tarde los chicos salen del colegio y pasan caminando. Puede ocurrir una tragedia”, lamentó.
Pedidos constantes
Mariela comentó que vecinos del barrio que trabajan en el Municipio han llevado el reclamo por reductores de velocidad en la esquina. “Se contactaron con el sector de Tránsito y respondieron que iban a buscar una solución, pero son promesas y no pasa nada, ellos hablan y, por ahora, no tenemos cambios. Dicen que no hay presupuesto para una loma de burro, aunque activaron un poco con los últimos dos accidentes: de repente surgieron fondos y dijeron que iban a instalar uno, pero no hay que esperar a que haya un muerto para hacer algo”, protestó.
Reclamos constantes
Por su parte, otra vecina aseguró a El1 Digital que “hay frenadas todo el tiempo”. “El tema es Pringles, porque es una calle muy transitada por la que también pasan colectivos. Entiendo que no van a poner semáforos en todas las esquinas, pero, si no se maneja tranquilo, es necesario. En los últimos cuatro años hubo como diez choques, aunque ninguno de gravedad”, resaltó.
Además, residentes de la zona expresaron su malestar en grupos vecinales de redes sociales. “La esquina no es peligrosa, los peligrosos son los que manejan que no frenan”, “Muchos años atrás había un cartel de cruce peligroso e igual se producían accidentes” y “Si frenamos y miramos a ambos lados, no debería pasar nada”, son algunos de los mensajes recurrentes.
Fuente: El1Digital